Yo jamás le había visto ya antes a él ni sabía qué pretendía hacer conmigo
Un sádico consigue placer al producir dolor, sensaciones intensas y malestar en otra persona. Ese dolor o bien malestar puede ser físico (como a lo largo de un azote), sensible y sicológico (como en una escena de interrogación), o bien ambos. Sigue leyendo