Si los dos desean ajustar el ángulo, trate de poner una almohada o 2 bajo su trasero
No os engañéis unos a otros, a menos que sea con permiso por un tiempo, para que puedan entregarse al ayuno y la oración; y únanse nuevamente, a fin de que Satanás no los tiente por su incontinencia Corintios. Sigue leyendo