Me agrada el sexo con amor y pasión, con ternura y efusividad
En algún instante cara el final de la celebración salí al balcón para respirar unos cuantos tragos de aire limpio. Desde ahí se veía el cuarto donde nos dejamos los abrigos. Al lado de ellos, encima de la cama, Celeste se estaba besando con Víctor. Sigue leyendo